Hoy, Hacienda Vieja Norte, se convirtió en la séptima comunidad del cantón en contar con sistema de alarma comunitaria.
Curridabat es la única municipalidad del país que ofrece este servicio, que incluye capacitación de varios meses, la instalación de alarmas sonoras en puntos estratégicos del barrio, sistema de control remoto y una aplicación móvil.
“El enfoque de Curridabat está basado en la participación y en la organización comunitaria. El éxito del sistema se encuentra en el compromiso de la familias y en que se conozcan unas a otras” explicó Kattia Mercado, funcionaria del Departamento de Cultura de Paz.
Una vez que los vecinos y vecinas han demostrado el compromiso, la Municipalidad instala el sistema, aporta los dispositivos y aplicación y ofrece capacitación y acompañamiento sobre su uso y brinda el respectivo mantenimiento.
El sistema es estricto, de modo que si una familia incumple los compromisos, deja de participar en los procesos o hace un uso inadecuado de la alarma, se le retira del sistema.
Las alarmas se instalan en puntos estratégicos de los barrios. La activación de la alarma se realiza bajo un protocolo general de uso que clasifica las posibles situaciones en alertas de riesgo bajo, medio y alto según peligrosidad y/o riesgo. Ante cada escenario la comunidad puede activar el perifoneo o la sirena y las luces, según sea necesario. Según la situación, también deben realizar su reporte al 9-1-1 donde será canalizado a los diferentes cuerpos de atención de emergencias.
El sistema no es solamente para la disuasión de la delincuencia, también permite generar avisos, por ejemplo, en caso de un incendio o un accidente dentro del hogar, mejorando también la seguridad ante ese tipo de eventualidades.
La aplicación utilizada es la Alerta Alcom que ofrece notificaciones a cada persona usuaria y se complementa con un chat de Whatsapp comunitario.
El Alcalde de Curridabat, Errol Solano Bolaños, quien participó esta mañana en la entrega del sistema de alarmas en Hacienda Vieja Norte, felicitó a las familias por la responsabilidad y entusiasmo con que han asumido el proceso.
«La seguridad es un derecho humano. Acá estamos viendo a cada quien asumir su responsabilidad en hacer valer ese derecho. Una comunidad comprometida, un gobierno local apoyando desde sus potestades, con innovación y con enfoque de organización y participación, que aseguran la sostenibilidad”, puntualizó Solano.
“Estamos construyendo una base muy sólida para facilitar a otras instancias estatales el cumplimiento de sus propias responsabilidades”, enfatizó.
El Alcalde manifestó su satisfacción por el compromiso mostrado en barrio Corazón de Jesús (más conocido como El Rastro, en Curridabat Centro) y La Romana, en Granadilla, que ya participan con entusiasmo en las capacitaciones y pronto verán sus sistemas de alarmas comunitarias instaladas.
Sí desea más información, puede escribir a culturadepaz@curridabat.go.cr
Así opina la comunidad
Carmen Paniagua, vecina de Hacienda Vieja.
“Todo ha sido muy positivo. Siempre fuimos a las reuniones porque nos interesa que el barrio esté muy bien. El sistema es excelente, y pensando en la seguridad es algo muy bueno que está haciendo la Municipalidad”.
German Mora, vecino de Hacienda Vieja Norte
“Estamos participando en un sistema muy innovador para mejorar la seguridad de la comunidad. Teníamos que asistir a las reuniones, muy interesantes y nuevas que nos ayudaban a comprender que debíamos tener un compromiso. Si no poníamos de parte nuestra, el asunto no funcionaba”.
María Luisa Elizondo, vecina de Hacienda Vieja Norte y ex regidora
“Veo un muy buen esfuerzo de la Municipalidad, porque este sistema tiene su costo, y también reconozco el esfuerzo de nosotros como comunidad, que hemos respondido. Hemos estado atentos a todas las reuniones y colaborando en lo que se pueda. La seguridad ciudadana es uno de los aspectos que ahora preocupa más”.
Jaime Quesada, vecino de Hacienda Vieja Norte
“Nosotros ya teníamos una organización en el barrio y esta interacción con la Municipalidad nos complementa muy bien y nos va a ayudar a profundizar la organización del barrio. Creo que es muy positivo. Hay que aprovechar que existe el Departamento de Cultura de Paz porque hace que las comunidades funcionen”.